Malestar en la Globalización: Dependencias en la era digital
Ponéncia presentada en el 6º Congreso Plataforma Mediterrana
La personalidad es un conjunto de características o patrones que definen a una persona, eso es: los pensamientos , sentimientos, actitudes, hábitos y la conducta de cada individuo, que de manera muy particular, hacen que las personas seamos diferentes.
De todos es conocido que el sujeto es el producto de la articulación de los registros biológico, psicológico y el social-cultural.
No nacemos con una personalidad determinada, sino que nacemos con ciertas características propias, que con el paso del tiempo y con el factor más determinante que es de origen ambiental, será como esta se ira definiendo.
Para el psicoanálisis los registros real, simbólico e imaginario, conforman una estructura que posibilitan conjuntamente el funcionamiento de lo psíquico.
Intentaremos articular estos registros para tratar de explicarnos el fenómeno de las dependencias en la era digital: ciberjuego, cibersexo, comunidades y redes sociales.
-A.- El contexto social actual.-
Hay un gran consenso entre los grandes pensadores que afirman que cada época tiene unas características propias que marcan nuestras vidas: eso es la forma de relacionarnos, de gozar y de enfermar.
¿Cuales son los rasgos fundamentales nuestra contemporaneidad? Lo que rápidamente nos viene a la cabeza es LA CRISIS. ¿Pero que crisis? Que es lo que está en crisis?
Los grandes cambios producidos por la globalización, de lo que se ha venido llamando postmodernismo, han transformado el espacio simbólico cultural donde la subjetividad se estructura. La postmodernidad engendra una nueva sociabilidad que depende del mercado, mercado reestructurado por el neoliberalismo.
El nuevo malestar de la cultura es el corolario de la ficción de que todo sufrimiento, angustia o dolor pueden ser resueltos con objetos. La reivindicación del sujeto adicto a enmudecer todo rastro de malestar, aparece así legitimada en nuestra sociedad hedonista.
La globalización es un fenómeno que hoy constituye uno de los factores psicosociales más destacables y uno de los retos mas importante de les ciencias psicosociales para el Siglo XXI.
Así pues la sociedad liquida, postmoderna, global, capitalista neoliberal ha impuesto cambios en todos los registros de nuestra existencia.
Algunos cambios que podríamos resaltar:
– 1.- En relación al tiempo.
Estamos en la era del furor. Hoy todo el mundo sufre de la enfermedad del tiempo. Las personas y las cosas estamos sometidos a la presión del la máxima rapidez.
Klaus Schawab, fundador y presidente del Foro Económico Mundial de Davos, dijo “estamos pasando de un mundo donde el grande se come al pequeño a un mundo donde los rápidos se comen a los lentos”.
No hay tiempo, no hay pausa, no hay intervalo, no hay coma, ni punto y coma.
La postmodernidad empuja a la acción, en contra de la reflexión y el pensamiento.
-2.- En relación al objeto: Sociedad de consumo o sociedad del “usar y tirar”.
Zygmunt Bauman,un brillante pensador de origen polaco,ha caracterizado nuestra sociedad como: sociedad líquida,contrapuesta a la sociedad sólida. Líquido como sinónimo de precario. Describe así la vertiginosa sustitución de objetos y relaciones, todo se vuelve obsoleto a gran velocidad y ello nos coloca en posición de consumidores consumidos.
Lipovetsky, pensador francés, subraya que el consumismo conduce a la decepción al desencanto y a la ansiedad, que a veces el individuo intenta paliar, anestesiando el ser (medicamentos antidepresivos, ansiolíticos, alcohol, drogas ilegales, comida, juego…..).
– 3. La Era de la pantalla global: la virtualidad, el ciberespacio.
Vivimos rodeados de pantallas. Pantallas en todos los lugares y en todo momento, en las tiendas, en los aeropuertos, en los coches, los aviones, pantallas pequeñas, pantallas planas , táctiles, ordenadores, consolas de videojuegos, teléfonos, ipad, ifon , GPS, e-boox, pantallas para verlo y hacerlo todo ahora mismo, solo con un clic: relacionarnos, jugar, hacer sexo. Eso si, todo virtual.
En estos momentos no hay estudios suficientes para determinar los efectos que la vida en la pantalla tiene en nuestra relación con el mundo y con los demás, pero lo que no podemos poner en duda es que está en proceso una tremenda mutación cultural que afecta de lleno a la propia existencia.
La pantalla tiene el poder de la inmediatez, todo es ya; la tolerancia a la espera, la frustración no tienen cabida.
-4.- La importancia de la imagen en la postmodernidad.
Pantalla es igual a imagen y la cultura contemporánea nos abruma con tal cantidad de imágenes que hace difícil encontrar el tiempo para leerlas o comprenderlas.
La imagen predomina sobre el registro simbólico de la palabra.
Si bien el registro imaginario es fundamental en la constitución del yo, permite una primera identificación, la imagen debe ser apalabrada, eso es, precisa de una lectura simbólica que permita comprender y diferenciar LA REALIDAD VIRTUAL Y LA REALIDAD REAL.
Las nuevas tecnologías senestésicas (mezcla de impresiones de sentidos diferentes) tiene un efecto en el cuerpo bajo formas de adicciones, abulia o anestesia.
La palabra adicto viene del latín, a-dictum y quiere decir no-dicho, algo de lo simbólico queda escamoteado.
La imagen es siempre mentirosa. La imagen es una ilusión de completud que da una satisfacción a la entrada pero que acaba produciendo angustia y depresión porque bloquean la falta y si la falta es bloqueada el deseo queda también obturado.
El sujeto se compara a esta imagen ideal y se deprime. Intentando emular les imágenes reparadas con fotoshop.
-5,-Fragilidad de los lazos sociales.
Los vínculos son maquinas de tejer, a través de los vínculos podemos tejer cosas sólidas.
Pero en la sociedad líquida-postmoderna los vínculos se han debilitado: Se observa una importante decadencia de las grandes instituciones: Escuela, Familia, Salud… La Democracia ha sufrido un profundo debilitamiento junto con el Estado como promotor de la economía del bienestar.
No corren buenos tiempos para la familia, principal forma de organización de los seres humanos: ni el matrimonio, ni los bienes compartidos, ni los hijos son referentes que mantengan la duración y el compromiso. La relación se asienta exclusivamente en la satisfacción que da quedando escamoteado el compromiso, la responsabilidad y el esfuerzo.
Las funciones maternas y paternas tienen un papel clave en el desarrollo del sujeto. Los hijos son proyectos a largo plazo y el largo plazo requiere compromiso, los hijos para crecer saludablemente necesitan: estabilidad familiar, ser tenidos en cuenta, ser escuchados, queridos y educados: esto quiere decir diferentes cuestiones: poner límites adecuados, ayudar a apalabrar el malestar, ayudar al niño/adolescente a soportar la espera, la frustración, que entienda que todo en la vida requiere un esfuerzo sostenido.
El sujeto necesita estar incluido como individuo, las redes sociales pueden dar la ilusión de estar incluido en una comunidad.
En Catalunya un 55% de los adolescentes de entre 12 y 17 años se declaran usuarios de alguna red social, se convierte en una herramienta imprescindible de comunicación para las nuevas generaciones. Su uso no es nocivo siempre que no substituyan las relaciones reales.
-6,- La sexualidad
Se evita el cuerpo a cuerpo, el cuerpo erógeno tiende a quedar en una virtualidad: las relacione están vacías de tiempo y de presencia. Los encuentros reales o presenciales que habían sido anteriormente virtuales, muchas veces son decepcionantes ya que no concuerdan con el ideal virtual.
El sexo on-line da una satisfacción inmediata sin tener que pasar por el trabajo de seducción, igual que cualquier otra droga.
– B.- Características psicológicas humanas que facilitan el empuje a la adición.
En “El malestar en la cultura” del año 1930, Freud dirá que la cultura está atravesada por el malestar y este, es inherente a ella, es decir que por más que tratemos de evadirlo siempre volverá a aparecer. Por tanto y para soportar ese malestar, el ser humano, ha utilizado diferentes tipos de calmantes que hicieran más soportables las penas y citará tres: poderosas distracciones, satisfacciones substitutivas y substancias embriagadoras. A estas últimas Freud las considerará como los métodos más eficaces para huir del sufrimiento por la manera en que influyen sobre el organismo.
“A este tipo de método no solo se le debe la ganancia inmediata de placer, sino una cuota de independencia respecto al mundo exterior. Sabemos que con la ayuda de los «quita penas» es posible sustraerse en cualquier momento a la presión de la realidad y refugiarse en un mundo propio, que ofrece mejores condiciones de sensación. Esta propiedad de los medios embriagadores determina justamente su carácter peligroso y nocivo.”
a): La contradicción humana frente el problema de la libertad.
Queremos ser libres, pero al mismo tiempo, la libertad es temida porque nos obliga a tener criterio propio, a tomar decisiones, eso es a renunciar. Para ser libre hay que saber tolerar la incertidumbre y a asumir la responsabilidad. En la sociedad líquida la responsabilidad de la propia vida tiende a ser eludida.
b): La negación de la muerte.
El ser humano en todas las épocas y culturas, se ha revelado contra la muerte. Nuestra finitud nos produce angustia, miedo, intolerancia. A pesar de todos los intentos para distraer y eludir la muerte que vemos desde tiempos inmemoriales, nunca como hasta ahora se ha visto un renegación tan radical de la misma: vivimos en una burbuja ilusoria de una eterna juventud, ayudada por la industria y los avances tecnológicos.
Las adicciones muestran esta postura contradictoria frente a la muerte. El adicto en tanto la repudia, va a su encuentro: sobredosis, carreras en sentido contrario…
c): El ser humano: prematuro i desamparado.
La especie humana nace prematura, respecto a otras especies animales. En sus primeros años de vida, el bebe es totalmente dependiente (madre, o sustitutos). Si no fuera per estos soportes externos, no saldría adelante por si mismo. Así pues en su raíz la especie humana es portadora de una dependencia original, la cual subsiste de alguna manera tota la vida. Somos seres relacionales, los vínculos son decisivos pera la construcción de la identidad y de la personalidad. El problema radica en que si ha existido algún fallo importante en la constitución de estos vínculos, si no se ha podido salir relativamente de la dependencia, es fácil caer en el laberinto de cualquier adicción que produce la ilusión de sentirse completo.
d).- La condición narcisista humana.-
El narcisismo hace referencia al amor hacia si mismo, apunta al autoerotismo y a la autosatisfacción, Si bien es un escalón necesario en el desarrollo de la personalidad éste debe ser trascendido para conseguir el pleno desarrollo el sujeto. En el narcisismo no hay puntos medios, solo cuentan los extremos: o todo o nada.
-C.- Las nuevas patologías .-
Si sumamos los rasgos referidos: la precariedad de la condición humana, y los aspectos más peligrosos del contexto social actual, tendremos como resultado un “caldo de cultivo” deadicciones junto con otras patologías propias de la época: – trastornos de la alimentación: la anorexia perfilándose contra la completud i el exceso, y les depresiones como consecuencia de la desintegración de lo social, de la decepción, de la imposibilidad de emular la imagen y las adicciones.
La presión que impulsa al sujeto a la acción, más el imperativo de consumir, más la falacia de la imagen que se presenta como completa e ideal, nos permite hacer hipótesis sobre las posibles causas de la generalización de las adicciones tan presentes en la actualidad. Adictos ha habido siempre, en todas las épocas y culturas pero es la primera vez que la sociedad en su conjunto es adicta. Si sumos el tabaco, el alcohol, les drogas ilegales, las legales como analgésicos, tranquilizantes, antidepresivos, hipnóticos, la comida utilizada no como alimento sino como ansiolítico, las navidades y los modernos gatges, el que esté libre de rasgos adictivos que tire la primera piedra.
Tras cada adicción hay un sujeto único con un sufrimiento particular. El síntoma no remite a la estructura, por tanto a través únicamente del síntoma no podemos hacer un diagnóstico.El síntoma de la adicción, como el de la depresión o la anorexia son solo eso, un síntoma, tendremos que escuchar atentamente al sujeto para poder averiguar la estructura del paciente y averiguar que función tiene en el sujeto. La escucha del síntoma nos remitirá a la estructura subyacente, etso es: neurosis, perversión, psicosis.
– En la neurosis; la adicción tendrá la función de distraer la falta, de anestesiar las penas.
– En la psicosis la adicción puede tener la función de impedir una mal mayor: evitar la angustia psicótica. En el caso de la psicosis a veces el síntoma de adicción es un mal menor que no debemos atacar frontalmente, dejar al sujeto sin su síntoma puede comportar riesgos graves, en este caso, se tendrá de tratar de instalar un síntoma que estabilice al sujeto a un pecio menor.
Adicción al juego on-line.
El juego es una parte importante de la experiencia humana; Todos hemos aprendido a relacionarnos con nuestro ámbito familiar, social y cultural a través del juego.
Se pone mucho el acento en el carácter recreativo del juego, pero el juego es mucho mes que esto: permite conocer, descubrir el mundo y prepara a los hombres para la vida adulta.
La aparición del juego simbólico se presenta exclusivamente en el ser humano junto con el lenguaje, intrínsecamente simbólico.
A partir de los años 70 los juegos de rol tuvieron su eclosión, los beneficios de estos juegos son tan importantes que psicólogos, pedagogos i educadores recomiendan su uso.
Con la aparición de Internet los juegos de rol se han ampliado de forma tremenda, pudiéndose jugar con jugadores de todo el mundo. Los juegos de rol y los juegos de azar tienen hoy gran cantidad de adeptos por su facilidad e inmediatez.
Como en cualquier otra actividad los juegos de rol y de azar son susceptibles de ser utilizados incorrectamente.Cuando el juego se desvía de su función lúdica, deja de ser un medio para convertirse en un fin es cuando podemos hablar de un uso patológico.
Una paciente me comentaba que su hermano ha vuelto a viciarse con el ordenador y ya no sale casi de casa. Pero esta vez no se aísla porque esté enamorado y chatea con la novia. El hermanoes un tipo postmoderno, se ha enganchado a Second Life. Cuando el juego pierde sus funcionesde prepararnos para la vida real y la vida transcurre en la pantalla, entonces estamos frente a una ludopatía.
Tenemos una importante y ardua tarea por delante.
Una tarea asistencial por un lado y otra en la que pondría el acento de prevención.
El trabajo asistencial con el sujeto de la adicción, en mi modo de ver, pasaría por tratar de ayudarle en su proceso de individualización, ayudarle a construir una identidad propia que conecte con lo social.
El aumento imparable de las ciber-adicciones necesita del trabajo conjunto de la sociedad: padres, profesionales e Instituciones para luchar no tanto en contra la adicción, sino para tratar de resolver los problemas que están en su base.
Necesitamos de nuestros jóvenes, la sociedad necesita urgentemente jóvenes con imaginación, creatividad y comprometidos en lo social para entre todos tratar de encontrar un modelo posible que permita la integridad y devuelva al sujeto su dignidad.
Isabel Cavallé Miranda
Especialista en Psicologia Clínica- Psicoanalista